miércoles, 31 de octubre de 2012

MILAGRO...!



MILAGRO.

Con el talle cimbreante...
¡Cual junco al viento!
Recorrió la estancia
con andar felino.

Sus ojos...
¡traviesos!
me decían todo...
en mensaje mudo
pero aun así;
¡...Contundente...Preciso... !

Relucían
sus fanales verdes.
¡Cual exóticas gemas!
La sonrisa jugaba
en su bello rostro.

Mientras ella decidida
avanzaba a mi encuentro,
el tiempo se detuvo...
desapareciendo;
las dudas y el miedo.

Y yo...
hombre milenario de soles,
¡sentía mil cosas distintas...!
 Y...atribuía
a un guiño travieso de los hados;
hacerme poseedor
de su inefable encanto...!

¡De su jovial sonrisa!
¡De su ávida inocencia!
Y el milagro inesperado
colmando mis sentidos,
al comprender...
¡Que había encontrado
el verdadero amor
en mi agreste destino!

autor:
Ignacio camaño.
Rosario Santa Fe Argentina
Derechos reservados
http://mishijasdilectas.blogspot.com

( Reminiscencias 15/08/1989)

Nota: Estimados amigos... Amables lectores de mis hijas literarias... Aprecio enormemente sus caricias y mimos sobre mis creaciones literarias y estoy muy agradecido a quienes me siguen y dejan sus comentarios sobre mis obras y sus "Me gusta"... pero, quiero aclararles que no entro en polémicas de ninguna índole sobre las opiniones personales de quienes las emitan, debido a experiencias anteriores... Creo, que hay canales adecuados para cada tema. Aquí, se trata de compartir momentos agradables mediante el arte poético que nos apasiona a los amantes de las letras, aunque ello, no prive a quien lo desee, de manifestarse como quiera, aun con críticas... sin embargo, el hecho de aceptarlas, no significa que entre en ninguna discusión ni polémica con quienes las emitan. Privando en mi, el afán de seguir disfrutando de la amistad de todos ustedes. Reciban el mas cálido de mis abrazos fraternales!!!!! Ignacio Camaño.


sábado, 27 de octubre de 2012



NO QUIERO QUERERTE



En el silencio de mi cuarto,
ahora que no estás
que ya te has ido...

Hurgo con avaricia en mis recuerdos,
tratando de entender por que motivos
dijiste tres palabras, que resuenan en mis oídos.

¡No quiero quererte!
-Me dijiste-
Y yo me río de tu tremendo desatino...

Pues, mientras te refugias en mis brazos
buscando con avidez el calor de mi cuerpo,
y me miras hondo a mis ojos...

Queriendo espiar tras mis fanales,
cuales son, mis sentimientos.
Para poder arrancar de tu mente las dudas.

Y al ver que en ellos, mi alma,
azorada, sobresaltada, temerosa y triste,
oculta el sentir que la embarga...

Ante el acoso de un nuevo fracaso,
que acecha en tus tres palabras
ominosas de malos presagios.

¡No quiero quererte! -Musitas quedamente-
Y  mientras tu boca habla,
tu cuerpo niega lo que pregonas...

Pues al besarme tu boca,
en los besos me declaran
que ya me estás queriendo!

Y aunque lo sigas negando
con tus tres palabras...
¡La sangre en las venas nos está quemando!

¡No quiero quererte!
-Me decías-
Con una expresión ambigua en tu rostro.

¡No quiero quererte!
-Repetías…-
Cuando yo inquiría los motivos.

Y tú…
Aniñada e incoherente insistías,
en no querer quererme.

Tres palabras…
En franca porfía,
con la esencia de la vida misma.

La vida…
Quien a su arbitrio te trae y te lleva,
con tu destino a cuestas.

Y tú…
Inocente mortal, pretendes profanar,
las leyes  de tu sino.

El que no me quieras…
Lo decidirá tu hado,
y apenas podrás oponerte con tu letanía.

Si has de quererme…
Lo harás aunque niegues
lo que estás sintiendo.

Pues los sentimientos…
Como un ser salvaje
ignoran las causas por la cual razonas.

Y aunque tu me digas
no querer quererme…
No podrás,  dejar de hacerlo.

Y estallará en tu pecho la clara evidencia
que la razón claudica…
¡Cuando da comienzo, la voz del sentimiento!


Autor:
Ignacio Camaño
Rosario Santa Fe Argentina
Derechos reservados
http://mishijasdilectas.blogspot.com

miércoles, 17 de octubre de 2012

¡POESÌA PARA LA MADRE...!!!!!
















¡POESÌA PARA LA MADRE...!!!


Con la fluidez
que la savia lleva,
desde la raíz del árbol
hasta la hoja,
que al borde de la copa
el cielo toca...
Es el sentir
que lleva impreso,
una poesía para la madre.

Poesía que deja inmerso,
en un océano de ternura,
el mas puro
de los sentimientos...
¡El amor!!!
por ese ser extraordinario
que es la madre...
¡La mujer que nos dio la vida!
tras nueve lunas de espera...

Es la guia vivencial
que perdura,
mas allá de la inevitable partida
que al cabo
de la lucha por la vida,
nos deja,
para volver en los recuerdos,
y continúa...
siendo parte de nuestras vidas,
aun, hasta en el aire...
que respiramos cada día.

Feliz, quien tiene la ventura...
de seguir disfrutando
del cobijo y del amparo
de la ternura de sus ojos,
que acarician hasta el alma
al mirarnos!
En esa mirada
 patentiza el regocijo
de mirar y admirar los hijos...
la obra de su creación...
que anidó nueve meses en su vientre.

Retoños que llegan...
cual milagros inesperados,
aun, siendo esperados y anhelados...
como frutos deseados
de una dilecta siembra!
Esos brotes tiernos
que serán su mayor orgullo...
y la continuación
de su génesis creadora!
La mayor herencia...
invaluable e insustituible
dejada a sus descendientes!

Como no creer,
que existe Dios...
si ella es un ángel que el nos dio
para sellar el vínculo con su creación!
Haciendo semejante a su condición,
a cada mujer de la humanidad...
de ser creadora, de vida universal!
¡Claro...que existe Dios!
Y es tan cierto,
como que su género...
¡Es femenino!
Quien si no haría...
¡Que las madres,  sean tan divinas...!!!

Autor:
Ignacio Camaño
Rosario Santa Fe Argentina
Derechos reservados
http://mishijasdilectas.blogspot.com

¡Dedicada con mucho cariño a Graciela Barbas Contratti y por intermedio de su gènero, a todas las madres del mundo!














domingo, 7 de octubre de 2012












CAUTIVADO


Verte a ti, caminar sin prisa...
es ver un paisaje de ensueño,
que invita a la imaginaciòn...!
Imaginar, recorrer tu continente...
Arcano territorio inexplorado,
por mis ansias de conquistador.

Deseando, ser el descubridor
de los tesoros escondidos
que yacen en su interior
y que lo hacen tan tentador...!
Resaltan bellisimas esmeraldas,
en el candor de tus bellos ojos,
que alumbran tu feliz deambular.

El rubí entreabierto de tu boca
muestra marfileña dentadura
ante la risa de tu espontaneidad.
Lìmpida sonrisa que adorna...
tu bello rostro dulce y angelical,
cincelado con armoniosas formas
en comunión ideal
con la perfección divina...

Tu abundante cabellera azabache
cae, como lluvia de hebras de noche,
sobre el nácar de tus senos turgentes,
y se derraman acariciàntes...
sobre las curvas de tus caderas.
Mecièndose al compás
del vaivén, de tu andar de gacela.

Es tan exuberante tu belleza...
que el mirarte,
me embelesa de pasión!
Y a veces,
hasta evito mirarte...
para que no se haga ostensible
la codicia,
de mi afán de posesión...
y la tentaciòn,
de abrasarte y besarte.
Mas...todo eso que siento,
lo domino
amarrando con mesura mi corazón
que se entrega,
cautivado por el amor.

jueves, 4 de octubre de 2012

POEMA 196

Impertérrito, prosigo observando...
su permanente deambular
en el devenir del tiempo
adosado a mi existencia.

Postrera ilusión de emanciparse
y romper las cadenas
que invisible lo ata
al pesado yugo de la dependencia.

Que metáfora extraña ha trastocado,
mi inicial ímpetu de la adolescencia...
que mi adulta existencia
lo conmina a emigrar de mi lado!

Porqué ignoto pasaje ha traspuesto
la inmemorial dimensión del tiempo?
En que extrema delicia del pasado
han quedado atrapados sus anhelos...?

Con inefable gracia me apostrofa
con marcado enfado ante mi insistencia,
de que se aleje de mi con sus quimeras...
Y se burla, mirándome con glaucos ojos;

Ojos de inocencia de mi niñez lejana...
que se adentran en mi piel ajada
por el paso de los años...
penetrando con ímpetu en mis venas...
navegando en los ríos de mi sangre...
En la esfera ignota del mar de mi vida;
Y en mi interior, se auna a mi inconsciente.

Platicando quejumbroso incoherencias
que no me atrevo a descifrar
para no irritarlo mas con mis dudas.
Intento explicarle con dulzura
que ya no es posible nuestra unión...
que ya mis años están frisando la vejez...
y que no creo correcto
que siga dando auge a su presencia...
Soy un hombre... -Le digo-
soy un hombre que ya pasé hace largos años
la tierna niñez y la frágil adolescencia...

Y se revela... Y estalla...
¡Càllate... Càllate... !!!
-Me dice ya colérico, perdida la paciencia.-
-Y agrega...-
¡No has de ser menos hombre, 
porque yo perdure en tu conciencia...
y en cambio, disfrutarás mas, mucho mas...
de tu efímera existencia...
pues, aquel que lleva un niño
morando en su adulto criterio...
llevará en si, 
un inmenso tesoro de inocencia!!!
Y se queda callado, cavilando... 
como cavila un niño por los juegos.

Entonces... la ternura gana mis sentidos
y extendiendo mis brazos lo insto...
a refugiarse en ellos,
amparándolo por su picara travesura
de perpetuarse en mis sentimientos...
estrechándolo contra mi pecho
como cualquier padre, lo hace con un hijo.