Tù...eres esa mujer.

Tù...eres esa mujer.

Tú te eriges
en la reina de mis sueños...
por ti,
galopa desbocado mi corazón
en la sabana inmensa
de mi fantasía
y aunque yo se que soy
un residente trashumante de Utopía,
no dejo de volar
con mis quimeras
cuando escribo mis poesías...

Cuando me interno en sus feudos
soy fiel vasallo a su mandato
y obedezco ciegamente.
como sumiso esclavo...
No hay limites
entre ficción y realidad
y puedo imaginar que todo es posible:
Alucino vivamente
con besar tu boca de cereza
y deliro con el deseo que me provoca
tenerte como Eva entre mis brazos.

Tú, eres esa mujer
que me logra transportar
a un mundo de maravilla...
¡La morada del Parnasso...!
donde poder vivir para escribir
amándonos entre versos de poesías.
Tú...tan solo tú
doncella que moras en mis sueños
entre rayos de luna y lluvia de estrellas...
Paseas en un jardín de rimas como flores
entre metáforas e imàgenes extra lùcidas.


Autor:
Ignacio Camaño
Rosario Santa Fe Argentina
Derechos reservados.
http// mishijasdilectas.blogspot.com

¡¡¡TUS OJOS!!!

¡¡¡TUS OJOS!!!



Aprendí a conocer tu alma
hurgando en tu mirada,
esperando el momento oportuno
en que pudiera sumergirme;
a navegar en tus ojos
de cálidas aguas mansas.

Me gusta perderme en tu mirada,
en esos ojos mansos y acogedores
con horizontes de verdes maizales...
Imagino que son dos luceros del alba
que acompañaràn  para siempre
los derroteros que transite mi existencia.

¡Tus ojos... que cuando miran
son un caleidoscopio
que se encienden y apagan
al compás de tus ansias
y en ellos se trasuntan
tus bellos sentimientos...!

¡Si tú pudieras ver
como te ven mis ojos...!?
¿Si pudieras saber
lo que siento al mirarte...?
Quizás acallarías
la mayoría de tus enojos.

¿Si pudieras ver...?
Si alcanzaras a percibir
lo que está implícito
en lo sutil de mi mirada...
talvez podrías tener
las repuestas a tus dudas.

Hay veces que me miras
y resplandece mi cielo...
¡Y si acaso me sonríes,
no puedo contener
el júbilo que me embarga
y como mi vida tiembla.!

¿Si pudieras entender
a descifrar mi mirada...?
No vacilarìas ni un instante
en ofrendarme dichosa
el mayor de mis deseos:
¡Mirarme... como yo te miro...!

Tendrías la certeza
que ni mil palabras te la dieran,
pues lo que ellas callan para engañar
engendrando aviesamente triquiñuelas;
¡¡¡En los ojos se manifiesta la verdad
con el candor de la esencia primigenia!!!


Autor:
Ignacio Camaño
Rosario Santa Fe Argentina
Derechos reservados.


NOTA: A consecuencia de aspectos legales no puedo utilizar como quisiera, el nombre de mi hijo como  seudónimo...Hasta encontrar una variable legal seguiré publicando mis hijas poéticas a mi nombre.