miércoles, 28 de agosto de 2019

¡EL SOL, LA LUNA Y EL TIEMPO...!

¡El sol, la luna y el tiempo...!



El astro Rey, 
experto y sagaz
con sus rayos solares,
bronceó la piel expuesta
de mi faz y mi continente.

Selene 
la reina nocturna,
plateo mis cabellos
con suaves caricias
de sus lunas llenas...

El tiempo,
curtió mi rostro
y todo mi cuerpo
dejando sus huellas
con filigranas de orfebrería.

El sol, 
ilumino mis días.
Felices y tristes jornadas
del trayecto de mi viaje,
de mi excursión por la vida.

La luna, 
apaciguo mis noches
con su ronda sin pausas
entre los astros y estrellas,
adormeciendo mi vivencial trajinar.



Grácil aletear de alas,
de luciérnagas y mariposas...
acarician los recuerdos,
de las noches y los días...
de mi vida peregrina..!

Remolinos de remembranzas,
afloran...como trigo en la llanura;
en la pradera exuberante,
donde moran mis memorias...
en vergeles de experiencias.!

Como luna trasnochada...
emergiendo de las sombras,
para ver en las auroras...
al galán de sus suspiros,
quien le da un beso de fuego...

Mis saudades se zambullen,
en el mar de los zargazos...
donde se han perdido mis sueños,
en sus naves de quimeras...
persiguiendo...estrellas de fuego..!

Como caja de pandora...
mi existencia trashumante,
aprendió que lo efímero...
es el baluarte infranqueable,
que ofrece...
indiferente ,la vida..!

Su inefable regalo...
nace y muere 
como fuegos fatuos,
diluyendose en un fugaz destello...
como luces de artificio,
ò como polvo de estrellas..!

Somos frágiles,
como las mariposas de efímera vivencia.
pero también,
somos como los diamantes:
¡El tiempo vivido,
valoriza mas su esencia..!

Cuando se aquiete mi sombra,
la ultima:
que la luz le de cobijo...
Habrán quedado mis hijas
como banderas al viento,
acariciando los sueños.

Siendo el escribir mi consuelo
contaran mis desvelos,
mis tiernas hijas literarias:
El sosiego del guerrero...
tras arduas luchas libradas
en las lides del vivir.


Autor:
Ignacio Camaño
Rosario de Santa Fe
República Argentina
Derechos Reservados.









jueves, 8 de agosto de 2019

TE SOÑARE ESTA NOCHE.



TE SOÑARÉ ESTA NOCHE...


Te soñaré esta noche...
Te soñaré como nunca
a nadie he soñado...!

Te soñaré, como a un hada.
Te soñaré, como un milagro
que Dios me ha brindado...!

Te soñaré tanto y tanto...
que en mi corazón,
solo estarás tú reinando...!

Te soñaré de tal manera,
que en mi vida
solo estarás tú a mi lado...!

Te soñaré con el alma,
pues lo que ella ama...
va mas allá de esta vida...!

Te soñaré noche y día...
Entre galaxias y estrellas,
y entre el alba y el ocaso...

Será mi sueño tan real
que no querré despertar
si tú no estás a mi lado.

Autor:
Ignacio Camaño
Rosario Santa Fe
República Argentina
Derechos reservados







jueves, 1 de agosto de 2019

AUSENCIA.



AUSENCIA...


Detrás, de las horas y los días,
en que no estás;
porque te has ido...
Hay algo mas que ausencia,
hay algo mas...
¡Cariño mio...!

Están las calles desiertas...
¡Están vacías...!
Está el cielo cubierto,
aunque brille el sol fecundo...
Están las noches blancas
por el sueño perdido.

Están los días largos...
Sin final...Heridos.
Hay algo mas cariño mio...
Hay tristeza...Hay dolor...
Hay miedos y temores,
por la posibilidad del olvido.

Hay música sin sonidos...
Hay charlas sin sentido
con los amigos...
Hay una angustia enorme
en el pecho dolorido...
Hay mucho mas...¡Cariño mio...!

Hay recuerdos presentes,
con vívidos destellos;
de un pretérito cercano.
Y hay presentes sueños,
de un futuro compartido;
entre tu amor y el mio...!

Hay necesidad ferviente
de tus abrazos y tus besos...
¡De este amor inmenso...!
Que pide a gritos enloquecidos...
¡Tu presencia aquí a mi lado,
aquí...aquí...muy cerca mio...!

Hay tanto...Tanto y tantas cosas...
¡Tantas cosas amor mio...!
Que es imposible dimensionar
la magnitud de este amor...
Solo se, que hay mucho mas...
¡Mucho mas que esto, cariño mio...!

Y al saber esto me desespero...
Miro la ventana entreabierta,
y al observar la luna solitaria;
te imagino tan sola como ella...
Mientras aquí yo también estoy solo...
¡Solo como Febo...ardiendo en mi hoguera!

Autor:
Ignacio Camaño
Rosario de Santa Fe
República Argentina
Derechos Reservados.